Un nuevo día de sol nos recibe al amanecer del décimo día de viaje por Asia Menor. Estamos teniendo mucha suerte en lo que al tiempo climatológico se refiere, la verdad. Pamukkale se está empezando a desperezar cuando nosotros lo abandonamos por la carretera que conduce hacia el sur, en dirección a Denizli la capital provincial. No llevamos ni un cuarto de hora de travesía cuando un pequeño cartel marrón nos indica cómo llegar a las ruinas de la antigua Laodicea ad Lycum: la primera parada de un día que promete ser largo y muy cargado de historia.
Foto 1.- Torre de flanqueo de la Puerta Oriental de la muralla tardorromana de Laodicea.
El yacimiento de Laodicea, aunque conocido desde hace muchas décadas, lleva en excavación solamente unos cuantos años: tiempo que ha sido suficiente para exhumar un conjunto urbanístico de considerable monumentalidad, elocuente testigo de la gran riqueza e importancia que poseyera la ciudad en sus buenos tiempos. Nosotros nos disponemos a visitarlo previo abono de la tarifa correspondiente en la taquilla del yacimiento. Eso sí, antes vamos a conocer un poco su historia a fin de poder interpretar mejor lo que veamos cuando estemos dentro.
Foto 2.- Sillar labrado con inscripción griega localizado en el paramento externo de la torre de la foto 1.