jueves, 15 de mayo de 2014

VOLUCE. Un recuerdo de Celtiberia.

Con este nombre se conoce a un antiguo oppidum arévaco localizado con cierta controversia a muy poca distancia de la soriana Calatañazor, en el llamado Cerro de los Castejones.

Sabemos de su existencia gracias a las menciones de dos fuentes clásicas: el itinerario de Antonino y el libro de geografía de Ptolomeo.

El cerro de los Castejones, antaño solar de la arévaca Voluce.

Es a través de Ptolomeo que conocemos su situación entre los arévacos, si bien él la nombra Veluca. Las coordenadas de la ciudad celtibérica, según el geógrafo de Alejandría, serían 11º50´ de latitud norte y 41°55´de longitud oeste, estando situada, de este a oeste, entre Tucris (localización desconocida) y Segortia –Segontia—Lanka (en las inmediaciones de Langa de Duero).

El itinerario de Antonino la incluye como Voluce en su Item ab Asturicam per Cantabria Caesaragusta, esto es la ruta entre Caesaraugusta (Zaragoza) y Astúrica Augusta (Astorga) pasando por una Cantabria que no debemos identificar con la Montaña costera. Concretamente la sitúa como sexta parada o mansio partiendo de Caesaraugusta, estando precedida hacia el este por la celebérrima Numancia –Numantia—y seguida (hacia poniente) por un asentamiento llamado Vasamam, identificable con la famosa ciudad de Uxama Argaela, cuyos restos se hallan muy cerca del actual Burgo de Osma.

Muralla principal de la antigua Voluce, en su frente oriental.